29 de diciembre de 2016

UNIDAD DIDÁCTICA 2: "EL OTOÑO - LOS ALIMENTOS"

La segunda Unidad Didáctica de este curso ha estado dedicada a el otoño y los alimentos. En cuanto a los alimentos, los objetivos fueron principalmente: clasificar alimentos según su origen, identificar alimentos sanos y distinguirlos de los perjudiciales, incorporar hábitos de buena alimentación e higiene, conocer ingredientes y elaborar recetas sencillas, etc. Y en cuanto al otoño, los objetivos estaban enfocados a reconocer características propias del otoño, como cambios del paisaje, ropa, animales, frutos secos y carnosos, etc.

En la asamblea, hablamos de quién desayuna antes de venir al cole y quién no, qué toman los que desayunan, hábitos alimenticios como si se lavan las manos antes de comer, si se lavan los dientes después, si comen sentados en la mesa junto a su familia, si comen muchas chucherías, etc.

Para empezar las actividades, hicimos un listado con las comidas favoritas de los niños/as de la clase, y después cada uno hizo un dibujo y escribió "a su manera" qué comida había dibujado..
Las comidas preferidas fueron deberes para casa un fin de semana. Porque en vez de presentar en clase de modo teórico recetas de comidas, que podían no motivar a los niños por no gustarle esa comida elegida por la maestra, y que además cocinar con fotos no tiene mucha gracia... lo que hicimos fue pedir a las familias que elaboraran en casa la comida preferida de sus hijos/as, con la participación de los niños/as enseñándoles de modo experiencial qué ingredientes se necesitan, cuál es el origen de esos alimentos, cómo se elabora la receta... y por supuesto ¡comérsela!

Además de hacerla y comérsela en casa, tenían como deberes elaborar un sencillo trabajo con la explicación de lo que habían aprendido, para contárselo a sus compañeros. Poco a poco, fuimos recibiendo esos trabajos y conociendo de primera mano lo que habían aprendido: que las lentejas no se pueden comer como están en el paquete sino que hay que dejarlas a remojo toda la noche para que se pongan blanditas, que para cocer la pasta hay que poner agua al fuego hasta que salen burbujitas, que para hacer un huevo frito hay que esperar a que el aceite de la sartén se caliente antes de echar el huevo... ¡¡y muchas otras cosas!!
Como veis en las fotos, han sido unos trabajos muy originales, y a ellos les ha hecho mucha ilusión presentar lo aprendido a sus compañeros.

También pedimos a casa que nos trajeran envases de alimentos que tuvieran su etiqueta. Conforme llegaron a clase los envases, fuimos analizando qué alimento contiene, cuál es su origen (animal o vegetal), y aprendiendo a leer sus etiquetas. Aprendieron, y muy bien, que el simbolito que llevan los envases con dos flechas formando un círculo quiere decir que son reciclables, y que para reciclar los envases hay que echar los de cartón al contenedor azul, los de cristal al verde, y los demás al amarillo.

Aprendieron también qué es el código de barras: un rectángulo con rayitas negras de distinto grosor que sirve para identificar el producto cuando la cajera lo pasa por el lector, y saber cuánto vale.

Y aprendieron que en los envases hay una tabla que se llama información nutricional, en la que se puede leer la composición del producto. Leyendo los datos de esa tabla, podemos saber cuánto AZÚCAR y cuánta GRASA tiene el producto, y si tiene mucha, entonces hay que comer poquito. Porque si comemos muchos alimentos que tienen mucha grasa nos ponemos gordos, y si comemos muchos alimentos que tienen mucho azúcar, además de ponernos gordos se nos pican los dientes y nos salen caries.

Los envases se quedaron en el rincón de la casita, para poder jugar con ellos.
A propósito de los alimentos con mucho azúcar, vimos un vídeo titulado Dientín (puedes verlo pinchando AQUÍ) en el que conocimos lo que le pasa a un niño que come muchas golosinas, y que además no se lava los dientes todos los días. Con este vídeo vimos la importancia de la higiene dental, pues aunque los dientes que tienen ahora se les vayan a caer, hay que aprender a cuidarlos.

Otra cosa que mandamos de deberes para casa fue recortar imágenes de alimentos, para practicar así en casa esta destreza que tanto le cuesta. Con los recortes que trajeron, y en esta línea de reconocer los alimentos sanos, elaboramos entre todos dos murales. En uno fuimos pegando los alimentos de los que podemos comer todo lo que queramos porque son buenos para la salud, y en el otro los alimentos de los que no debemos comer mucho porque son menos sanos. Para hacer los murales repartimos las fotos entre todos, y de uno en uno fuimos diciendo qué alimento nos había tocado, cuál es su origen, y si pensamos que es sano o que no lo es.
Como podéis ver en la imagen, no dijimos que no se pudiera comer de todo lo que aparece en el mural de la derecha, sino que no debemos comer mucho, porque tienen azúcar y/o grasa, y por tanto no son buenos para la salud. Es importante que ellos vayan sabiendo estas cosas, y que vayan tomando conciencia de que no podemos alimentarnos de pizza, hamburguesas, patatas fritas, bocadillos, galletas, chocolate, gusanitos, gominolas... por mucho que nos gusten. Deben aprender que de estas cosas podemos comer, pero en pequeñas cantidades. Y que aunque a los abuelos les guste dar de merendar un paquete de galletas, por ejemplo, tienen que saber que comérselo entero no es sano. Y que si en el parque abren una bolsa de gusanitos, comérsela entera no es sano, es mejor comer unos pocos y guardar los demás para otro día. Y tienen que aprender que para comer y para cenar es muy sano comer carne, pescado, huevos, pasta, arroz, lentejas, fruta, ensalada, etc. También hablamos de que estas cosas a veces los mayores no las saben, o se les olvidan, y entonces ellos se lo tienen que recordar. Espero que en casa os estén dando la lata con estas cosas... porque querrá decir que están aprendiendo hábitos alimenticios que les serán muy útiles cuando sean mayores.

En cuanto al OTOÑO, entre todos decoramos la puerta de la clase pintando hojas secas con témpera sólida.
En el rincón de matemáticas hicimos un par de fichas de asociación número - cantidad con frutas:
Fuimos al mercado semanal de Algezares, junto con los niños y niñas de 5 años y los familiares que nos quisieron acompañar, para comprar frutos de otoño (puedes ver la noticia publicada en la página web del colegio pinchando AQUÍ). Antes de la salida, elaboramos en clase la lista de la compra. Entre todos, fueron diciendo las frutas que les gustaría comprar, y cuántas íbamos a comprar. Al hacer esta lista vimos que algunas frutas que les gustan no son frutas de otoño como por ejemplo la sandía, la fresa...
Como veis en la foto de la lista de la compra, para los frutos carnosos usamos números conocidos (del 1 al 10). Pero para los frutos secos usamos números "grandes", para que les vayan sonando: 50 y 100.

El día de la salida al mercado, lo que hicimos fue recortar la lista de la compra, y por parejas elegir qué iban a pedir en el puesto de fruta. Cuando llegamos al mercado, entregué a cada pareja su trozo con la fruta que tenía que pedir y la cantidad, y ellos fueron los responsables de leerle al tendero lo que querían. Les encanta ser ellos los que piden la fruta, sentirse mayores al hacer la compra. Y después de comprar, nos fuimos un rato al parque a tomarnos el almuerzo y jugar todos juntos.
Al día siguiente, tuvimos los tradicionales Talleres de Otoño con la colaboración de las familias (en el mismo enlace de antes está la noticia de la web del colegio y el enlace a las fotos). Cuando entramos al pabellón de Infantil... ¡el suelo estaba lleno de hojas, había llegado el otoño! Realizamos 4 talleres en los que lo pasamos muy bien.

Y creo que no me olvido de nada. Perdonad por tardar tanto en publicar esta entrada, pero es que había tanto que contar...

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