15 de febrero de 2017

PROYECTO DE HABILIDADES NO COGNITIVAS: CREARTE (3)

Hoy os cuento una nueva sesión de CREARTE, dentro del Proyecto de Habilidades no Cognitivas en el que estamos participando (puedes ver las anteriores entradas pinchando AQUÍ). Las sesiones de Crearte consisten en talleres de arte, con la finalidad de desarrollar las habilidades no cognitivas de los niños/as.

Esta sesión tenía por objetivos "promover la atención y la participación individual y grupal", "reforzar el trabajo por turnos y la colaboración conjunta", y "tolerar la frustración a través del trabajo por turnos". 

Tras recordar en asamblea las normas de las sesiones, elegir al ayudante de Flama y hacer su lista de cumplidos, dijimos que cada equipo iba a hacer un dibujo entre todos sus miembros. A continuación, cada equipo se sentó en la mesa de un rincón de la clase. En cada mesa pusimos una bandeja de lápices de colores, y un papel tamaño Din-A3. Establecimos los turnos en los que iban a dibujar (en cada equipo, los numeramos del 1 al 4), y dijimos que cada turno sería de 4 minutos. Durante los 4 minutos de su turno, cada uno podía dibujar en el papel con total libertad. Pasado este tiempo los dibujos rotaban al siguiente y así sucesivamente cada 4 minutos hasta que pasara por todos los miembros del equipo. Así al acabar la actividad, habían hecho un dibujo entre todos. ¿Y qué hacían mientras no era su turno? Pues esperar en silencio, atentos a lo que el compañero que tenía el turno estaba dibujando.
Cuando acabó el último turno, volvimos a la asamblea. Pusimos los 4 dibujos en el suelo, y fuimos analizándolos, explicando cada uno lo que había dibujado.
Pudimos ver que en un equipo cada uno había completado lo que el anterior había dejado a medio y había añadido algo más (por ejemplo: coloreo el coche que el anterior no ha podido terminar, y añado dos árboles, coloreo el árbol que está a medio y añado una niña...). En otro equipo, como el primero había dibujado un edificio, los demás completaron el dibujo para que pareciera una ciudad, y dibujaron más edificios, gente en la calle... Y en los otros dos equipos, cada uno ocupó un trozo del papel para dibujar libremente sin tener en cuenta lo que habían dibujado los demás.
Fue una sesión muy bonita, en la que todos disfrutaron de su turno para dibujar libremente, y respetaron el turno de sus compañeros en silencio. Los dibujos los tenemos expuestos en el pasillo junto a la puerta de clase.

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