En asamblea, les dije que había preparado la palabra primavera con unas letras muy bonitas, pero que se me habían desordenado y necesitaba su ayuda para ponerlas en orden. Coloqué las letras en el suelo, y leí lo que ponía. Se partieron de risa, y me dijeron que eso no significaba nada...
Les dije entonces que aunque tengamos las letras de una palabra, si no están en orden no pone lo que queremos que ponga... Y les pregunté qué letras había que cambiar de sitio. Les dije que igual que cuando escribimos, íbamos a ir cambiándolas de izquierda a derecha.
Empecé preguntando "¿la primera está bien?" a lo que algunos respondieron que no, porque esa era la de mapa, y primavera no suena como mapa. Les pregunté "¿entonces primavera con cuál empieza?" (poniendo énfasis al sonido de la P), y muchos respondieron "¡con la de pala!". Como veis, el trabajo diario con los fonemas (sonidos) de las letras de sus nombres y con el abecedario de clase va dando sus frutos, y no sólo han aprendido bastante bien las vocales sino que ya son muchos los que conocen bastantes consonantes.
Colocamos entonces la P la primera. Así, poco a poco y de una en una fuimos poniendo énfasis en los fonemas de las letras de la palabra primavera, y cambiando las que no estaban bien por las correctas (el que acertaba cuál había que cambiar, salía a cambiarla). Cada vez que cambiaban una letra, yo volvía a leer lo que ponía, y otra vez carcajada general, porque la palabra escrita aún no significaba nada.
Al llegar a la última de las imágenes anteriores, ya casi lo teníamos: ponía PRIMAVEAR. Al preguntar si ya estaba bien, dijeron que no, pero les pedí si alguien podía decir por qué. Una niña nos explicó que "no está bien porque primaverAAAAA acaba en A, y la palabra que tenemos escrita acaba en RRRRRRR". ¡No se puede explicar mejor! Cambiamos de sitio las dos últimas letras y....... ¡¡ahora sí!!
Todos estaban contentísimos porque me habían ayudado a ordenar las letras, y además lo habían hecho muy bien. Les insistí mucho en que las letras de una palabra tienen que estar en orden, porque si no, no pone lo que queremos.
Como ese día habían faltado algunos, y les había gustado mucho hacerlo, al día siguiente repetimos de nuevo la actividad. Les dije "como ya las tengo ordenadas, tenemos que poner las letras de la palabra primavera en el rincón de la investigación" e hice como que se me escapaban de la mano y se caían al suelo. Y claro, dijeron que teníamos que ordenarlas otra vez, jeje. Repetimos la actividad igual que la he explicado antes, pero esta vez algunos ya tenían mucho más claro qué letras había que poner. Y fue gracioso porque cuando las tuvimos ordenadas, me dijeron "ahora colócalas ya, no se te caigan otra vez y tengamos que volver a ayudarte a ordenarlas".
Actividades como esta hacen que apliquen lo que van aprendiendo a situaciones nuevas, y que vean la importancia de conocer los fonemas (sonidos) de las letras para poder escribir palabras correctamente.
Empecé preguntando "¿la primera está bien?" a lo que algunos respondieron que no, porque esa era la de mapa, y primavera no suena como mapa. Les pregunté "¿entonces primavera con cuál empieza?" (poniendo énfasis al sonido de la P), y muchos respondieron "¡con la de pala!". Como veis, el trabajo diario con los fonemas (sonidos) de las letras de sus nombres y con el abecedario de clase va dando sus frutos, y no sólo han aprendido bastante bien las vocales sino que ya son muchos los que conocen bastantes consonantes.
Colocamos entonces la P la primera. Así, poco a poco y de una en una fuimos poniendo énfasis en los fonemas de las letras de la palabra primavera, y cambiando las que no estaban bien por las correctas (el que acertaba cuál había que cambiar, salía a cambiarla). Cada vez que cambiaban una letra, yo volvía a leer lo que ponía, y otra vez carcajada general, porque la palabra escrita aún no significaba nada.
Como ese día habían faltado algunos, y les había gustado mucho hacerlo, al día siguiente repetimos de nuevo la actividad. Les dije "como ya las tengo ordenadas, tenemos que poner las letras de la palabra primavera en el rincón de la investigación" e hice como que se me escapaban de la mano y se caían al suelo. Y claro, dijeron que teníamos que ordenarlas otra vez, jeje. Repetimos la actividad igual que la he explicado antes, pero esta vez algunos ya tenían mucho más claro qué letras había que poner. Y fue gracioso porque cuando las tuvimos ordenadas, me dijeron "ahora colócalas ya, no se te caigan otra vez y tengamos que volver a ayudarte a ordenarlas".
Actividades como esta hacen que apliquen lo que van aprendiendo a situaciones nuevas, y que vean la importancia de conocer los fonemas (sonidos) de las letras para poder escribir palabras correctamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario