El pasado jueves tuvo lugar en el colegio el simulacro de terremoto que según la normativa vigente, debe realizarse en el primer trimestre de cada curso escolar.
En el aula de 3 años, se ha planteado a modo de juego, motivando que los propios niñ@s piensen qué podría pasar si el suelo se moviera, y qué podríamos hacer para evitar que nos pasara nada. Ellos mismos llegaron a la conclusión de que las cosas que hay en las paredes podrían caerse, y que para protegernos, el mejor sitio donde podríamos meternos para que nada nos cayera en la cabeza sería debajo de las mesas.
Cuando llegó el momento del simulacro, los niñ@s reaccionaron según habíamos practicado con anterioridad: nos metimos debajo de las mesas o de los marcos de las puertas protegiéndonos la cabeza, y a la señal de la sirena salimos en fila al punto de encuentro con rapidez pero sin correr.
Para más información, podéis ver la noticia publicada en la página web del colegio pinchando AQUÍ.
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