Podemos definir un PUZLE como "piezas sueltas que colocadas en su espacio y emplazamiento correctos forman una imagen o un objeto". Estos juegos son muy apropiados para estimular el desarrollo cognitivo de los niños/as, ya que potencian las habilidades del pensamiento mientras nos retan a colocar de manera correcta todas las piezas. Jugar a colocar sus piezas hace que se fijen en ellas, las observen y analicen comparándolas con el resto para ver dónde encajan según su forma, color, dibujo... Es decir, ponen en juego al mismo tiempo la abstracción, la predicción, la concentración...
Como vemos, son muchos los beneficios de los puzles, estando demostrado que estos juguetes:
- desarrollan capacidades y aumentan habilidades: observación, comparación, coordinación, atención, motricidad, lateralidad, control del espacio, etc.
- desarrollan y potencian la motricidad fina, al tener que colocar cada pieza en el lugar exacto.
- mejora la inteligencia visoespacial (habilidad de pensar y percibir el mundo en imágenes).
- si no tienen delante el modelo que han de construir, los puzles ejercitan la memoria visual, puesto que tienen que recordar cómo era el dibujo que ahora tienen que recomponer.
- favorecen la planificación, la elaboración de una estrategia, la superación de desafíos. Benefician la disposición a ser resolutivos.
- aumentan la tolerancia ante las dificultades, ayudan a superar las frustraciones, buscando la manera de lograr el objetivo.
- mejoran la autoestima, gracias a la superación del reto. Conseguir armar puzles ayuda a sentir que puede lograr lo que se proponga.
- si se hacen entre varios, fomentan la sociabilidad y con ella el lenguaje.
- fortalecen los vínculos socio-afectivos, ya que se trata de una actividad que puede compartirse, aprendiendo así la importancia de la cooperación y el trabajo en equipo para conseguir un objetivo.
- son relajantes y pueden ayudar a controlar el estrés.
Como veis, todo son beneficios con estos juegos. Desde principio de curso, tenemos una estantería llena de puzles de distinto número de piezas, y generalmente una vez por semana dedicamos el tiempo en el rincón de matemáticas a este juego. Yo tengo una tabla de doble entrada en la que están registrados todos los puzles disponibles, voy proponiendo a cada niño/a de manera individual qué puzles va realizando (con dificultad creciente), y cuando lo consigue completar se lo apunto en la tabla. Así, cada uno/a va progresando a su ritmo, y hay algunos niños/as que hacen puzles de 8 piezas, otros de 12, de 16... cada uno a su nivel. Si quieren, pueden hacerlo entre varios, pero en ese caso no se lo apunto. Realizar puzles en parejas les viene muy bien para compartir estrategias y lograr el objetivo cooperando en equipo. Pero el registro es para evaluar el nivel de progresión de esta destreza de manera individual.
Como veis, este es un juego con muchos beneficios, que los niños/as pueden practicar también en casa tanto solos como en familia. ¿Os animáis?
No hay comentarios:
Publicar un comentario